Muchos empresarios de PYME’s en general y pequeños hoteleros en particular, continúan dándose cabezazos contra la pared cuando descubren que no venden por las Redes Sociales a pesar que su consultora de confianza les dijo que esto era la panacea.

¡Lo primero que debes hacer, sr. pequeño y mediano empresario es leer unos cuantos blogs en los que ya te han explicado por activa y por pasiva que en las Redes Sociales no se entra para vender!. Al menos no para vender directamente. Las Redes Sociales son una herramienta que, unida a un blog, a una estrategia de email marketing, …, y,  finalmente, a tu propia web, conforman un conjunto a través del cual se llega a vender, siendo el punto real de tu venta, la propia página web de tu negocio.

Es cierto que, en algunos casos, se puede vender directamente vía Redes Sociales, como Facebook o Twitter, pero esto no es lo habitual. En cualquier caso para conseguir algo parecido, en Facebook por ejemplo,  necesitamos invertir en el desarrollo de una aplicación que nos permita adentrarnos en esta vía – lo cual no es sencillo. Desde luego que las Redes Sociales sirven, y para mucho, pero cada uno debe verlo desde la óptica que le corresponde y desde la situación que vive, porque la mayoría no somos Starbucks, ni Dell, ni Microsoft, ni Zara, ni Coca-Cola, ni McDonalds,… por citar algunos (una buena parte) de los que su propio nombre ya es una Red Social.

Así que, mientras seas una empresa con aspiraciones y ambición, pero con una mini estructura si la comparamos con la lista anterior, yo te aconsejaría – si me permites – que plantees tu estrategia en dos parcelas bien diferenciadas:

1. Redes Sociales como Twitter, Facebook, Linkedin (y más)… que sirven para hacer marca, para generar presencia a base de participar en ellas (con una estrategia). Así conseguirás 2 cosas: 

– Crear la necesidad a quien no la tenga.
– Ser la opción para el que tenga la necesidad.

2. Página Web propia. La base para vender en Internet es la propia página web. eso es como si dijéramos, el cuartel general, «la tienda». La Web tiene que estar optimizada y ser dinámica, o sea, que los contenidos vayan cambiando regularmente, con una estrategia y en base a unas palabras clave determinadas, que son con las que quieres posicionarte.

Resumiendo, básicamente, en las Redes Sociales generas presencia, fortaleces la marca y consigues más visitas a tu página web. Una vez en la página web, tendrás que tenerla recogida, aseada y acogedora, para que todas esas visitas se conviertan en ventas. Pero es en tu página donde vendes, no en Redes Sociales, a no ser que seas  Starbucks, o Dell, o Microsoft, o Zara, o Coca-Cola, o McDonalds,… por citar algunos (una buena parte) de los que su propio nombre ya es una Red Social.

La imagen la he tomado prestada del blog Literateadas.