La percepción popular y de los últimos siglos sobre los alquimistas, es que eran charlatanes que intentaban convertir plomo en oro, y que empleaban la mayor parte de su tiempo elaborando remedios milagrosos, venenos y pociones mágicas.
Fundaban su ciencia en que el universo estaba compuesto de cuatro elementos clásicos a los que llamaban por el nombre vulgar de las sustancias que los representan, a saber: tierra, aire, fuego y agua, y con ellos preparaban un quinto elemento que contenía la potencia de los cuatro en su máxima exaltación y equilibrio.

         Fuente: Wikipedia

No se a vosotros, pero a mi esto me recuerda bastante a lo que ocurre hoy en día con esto de las Redes Sociales, ante las que me pregunto…

 …Qué actitud es mejor:  ¿catastrofista o idealista?
Hay muchos alquimistas 2.0 que intentan lavarnos el cerebro diciéndonos que «las Redes Sociales salvarán al mundo empresarial», sin embargo conviene hacer un ejercicio mental y ponernos en los dos extremos:
Visión idealista:
En Internet se habla de mi marca y debo enterarme. Hasta aquí bien. Una vez que me entero de lo que hablan, participo en la conversación y, como a base de presencia y charla, voy descubriendo cuáles son las inquietudes de mis contertulios, entonces ya estoy en disposición de generar contenido que les interese. De esta forma voy creando una confianza a mi alrededor que va haciendo crecer una comunidad de adeptos a mi marca, la cual en breve, comenzará a divulgar mi mensaje por toda la red convirtiendo mi marca en algo viral. De tal forma será esto que, en poco tiempo – meses quizá – mi mensaje habrá llegado a decenas de miles de personas interesadas en el mundo hotelero y, como mucho en un año, a millones. Esto provocará un aluvión de visitas a mi Web con un alto ratio de conversión ante el que no daré abasto. La empresa crecerá porque yo, con mi buen hacer en Redes Sociales, habré logrado grandes beneficios económicos para mis adorados jefes. Me pondrán por esto en un altar y me convertiré en el icono marketiniano por los siglos de los siglos.
Los aprendices de alquimistas, a lo largo de la historia de la disciplina, se esforzaron en entender la naturaleza de estos principios y encontraron algún orden y sentido en los resultados de sus experimentos alquímicos, que a menudo eran socavados por reactivos impuros o mal caracterizados, falta de medidas cuantitativas y nomenclatura hermética. Esto motivaba que muchos después de años de intensos esfuerzos acabaran arruinados y maldiciendo la alquimia. Los aprendices por lo general debían empezar por trabajar en el reino vegetal hasta dominar el régimen del fuego, las diversas operaciones y el régimen del tiempo.
          Fuente: Wikipedia
Visión catastrofista:
En Internet se habla de mi marca y debo enterarme. Hasta aquí bien. Una vez que me entero de lo que hablan, participo en la conversación y, como a base de presencia y charla  voy perdiendo fuelle porque me doy cuenta de que muy pocos me contestan y, de esos pocos,  la mitad son otras marcas que quieren venderme algo. De la mitad que queda, un 50% son contactos personales que tengo yo (como persona) en otras redes y me hacen el favor de seguirme para que no me sienta abandonado. Así que no me quedan más que 10 ó 12 que me han seguido porque algo de mi les ha gustado. De esta forma no hago más que dedicar horas y horas a Twitter, facebook y demás para nada. Eso si, me lo paso muy bien, pero productividad nada de nada. Me dijeron que tenía que entrar aquí. Yo mismo he vendido esa moto a otros que, incluso, han confiado en mi y ahora me encuentro en una situación vergonzosa, porque lo único que se consigue en las Redes Sociales a nivel empresarial es perder el tiempo y no recibes ni un céntimo de retorno. Creo que después de 3 meses así voy a abandonar.
Pues, hombre, ni tanto ni tan calvo. Quizá el término medio sea el adecuado (como casi siempre). Mientras escribía este post he leído otro que venía muy al caso:  Social Media no es comunicación, es conversación.
Cabe señalar que la elaboración de la piedra filosofal es arriesgado y se necesita tiempo y dinero para construirla, además de una enorme paciencia. ¿Por qué es arriesgado? Porque en uno de los magisterios hay compuestos presentes como la pólvora y dicen que más de un alquimista ha muerto por la explosión, si es que se aplica calor de forma inadecuada. ¿Por qué tanto tiempo? Se somete al fuego la materia prima durante años porque los alquimistas purifican la materia con fuego y probablemente también sea desde una perspectiva más científica una forma de hacer ceder a la materia y mostrar propiedades desconocidas para muchos. ¿Dinero? es necesario para poder mantener el fuego durante años.
         Fuente: Wikipedia
En fin ¿qué actitud tenéis vosotros?. ¿Conocéis a alguien que adopte alguna de las dos actitudes?.