Momo fue la mejor community manager

Momo fue la mejor community manager

A veces da miedo pensar en que todos los conceptos están ya inventados y que lo único que cambia son los entornos, los nombres de esos conceptos y, claro,  la tecnología, para manejarlos. Cuando Michael Ende publicó su novela juvenil, Momo, allá por 1973 no sabía – era imposible – que estaba tratando el tema de las redes sociales y estaba describiendo lo que 40 años después se iba a convertir en la principal característica del community manager, así como también describiría lo que se iba a convertir en uno de los principales problemas de los que trabajamos en el mundo de las redes sociales. Para entenderme, lo mejor es que echéis un ojo a lo que hay escrito sobre Momo, de Michael Ende en la Wikipedia.

Aún así, os resumo:

Momo es una niña cuya virtud principal es ¡saber escuchar a los demás! y gracias a eso va adquiriendo una habilidad especial para comprender los problemas y las necesidades de los otros hasta el punto de ser capaz de dar con la solución. ¡Cuántos community managers querrían! ¿eh? Lo que ocurre es que, como siempre, aparecen los problemas en forma de hombres grises que no son más que ladrones de tiempo ¿os suena? Además tiene la ayuda de Gigi – un cuentacuentos – y de Beppo – un barrendero pausado y extremadamente paciente -. Entre los tres logran tener una gran comunidad a su alrededor, en la que se escucha a todos y se responde de forma útil, esperando con paciencia a que llegue el mejor momento para actuar y ser certero en lo que se cuenta. Mientras tanto, el cuentacuentos llena los espacios vacíos con historias que logran mantener la atención durante el tiempo necesario.

¿Cómo lo veis?

Si trasladamos estos personajes al entorno online en general y de las redes sociales en particular creo que tenemos los ingredientes necesarios para una gestión óptima del social media.

Si alguno no tenía claro lo que debe ser un community manager, leed Momo, de Michael Ende, un verdadero manual repleto de metáforas perfectamente aplicables al Social Media, pero publicado en 1973.

El 2.0 y el concepto del tiempo

El 2.0 y el concepto del tiempo

Hola, amigos.


Creo que cabe hacer un pequeño análisis en lo que al tiempo, al paso del tiempo, al tiempo de espera se refiere en un entorno 2.0.. Quedó claro en la Teoría de la Relatividad de Einstein. Por lo tanto, podemos decir que el tiempo es un invento del hombre para poder tener un control sobre los acontecimientos. En la mencionada Teoría de la Relatividad queda claro que no es lo mismo la velocidad de la luz desde el punto de vista terrestre (metro como unidad de medida de la distancia), humano, que desde el punto de vista del Universo y la Galaxia (año luz como unidad de medida de la distancia).

Sin llevarlo a estos extremos, a los que el entendimiento humano le cuesta llegar a ver, podemos establecer una analogía entre el entorno 1.0 y el entorno 2.0.

Es muy simple:

Lo que en el 1.0 son quince minutos, en el 2.0 se puede extender a 2 días, por no decir 1 semana.
Lo que en el 1.0 es inmediato, o instantáneo, en el 2.0 puede ser cuestión de dos o tres horas.

Estos son dos ejemplos, pero valen para comprender la visión del tiempo de espera que hay que considerar como adecuado en un entorno 2.0, en la Web 2.0, en las redes sociales de Turismo.
Y esto, si bien pudiera parecer un obstáculo, no lo es tanto. Por ejemplo es una ventaja a la hora de debatir algo, pues tienes mucho más tiempo para pensar que en una conversación telefónica improvisada.

El gran problema de todo esto es que esta concepción del tiempo debe ser asumida por todos los partícipes de este entorno.
Si un cliente formula una queja en la página web de un hotel (los que tengan esta opción abierta), este cliente debe ser consciente de que la respuesta que espera no será inmediata, según el concepto de «inmediatez 1.0», pero si lo será según la «inmediatez 2.0», o, al menos, debería serlo.

Es otro ejemplo más acorde con nuestro sector. Pero todo esto viene para formularos una pregunta, o para que os lo preguntéis vosotros mismos:

¿Podemos establecer un sistema de medida del «tiempo de espera 2.0», o «tiempo de respuesta 2.0», con equivalencias en el 1.0?. Sería algo así como traducir de Euros a Pesetas, pero de forma más etérea e intangible.

Es complicado ¿Eh?.

Hasta la próxima.

Rafael