Hola, amigos.
Antes de nada, una pequeña explicación: He catalogado a este tipo de empleado como el VII, siendo el anterior el V, debido a que Marcos Alonso ha hecho una aportación a la serie y ha dado a luz al Empleado de hotel (VI). El empleado Mafioso. Así que, entre unos y otros estamos logrando una serie que empieza a ser consistente. Mi objetivo era y es llegar a diez. Ya sólo quedarán tres. Después podríamos hacer con ellos como con los Diez Negritos de Agatha Christie.Pero vamos al tema:

Quizá deberías haber conocido a Cosme Bocanegra, para poder tener una idea clara de este tipo de empleado. Pero, como lo conocéis, voy a intentar explicároslo.
Cosme Bocanegra esa un tipo, que de tan solitario, no puede pasar desapercibido. Si le hubierais conocido estaríais conmigo en que hubiea podido ser el prototipo de protagonista de aquella serie de televisión titulada «Vivir cada día».
Él es un hombre tímido, de aspecto enjuto y más bien tirando a poca cosa. Hace su trabajo de forma eficaz, pero no se nota, no vende su imagen profesional. No sabe hacerlo. Suele estar ubicado en alguna oficina pequeña, él sólo. No hay un puesto específico que pudiera haber ocupado, pero, para entendernos, es un puesto solitario, sin compañeros, como el de encargado de almacén o valet. Aunque el estar sólo no es determinante para definir su estereotipo, pues podría haber sido pinche de cocina o camarero de room service y su caracter habría seguido siendo igual de huraño.
Pero es huraño por su timidez. Como decía antes su trabajo lo hace bien, de forma eficaz. No da ningún tipo de problema. Por un lado carece de proactividad y por otro no permite que nadie se meta en su terreno. Es incapaz de explicar a nadie cómo hace las cosas y, sin embargo, no nos equivoquemos, es amable con quien le habla. Incluso, a veces, sonríe.
Todos se preguntan si tiene amigos, incluso hay quien dice que lleva una doble vida en un perfecto contraste entre lo laboral y lo privado. Mas esto es una leyenda, un mito, el mito de Cosme Bocanegra . El caso es que nadie puede definirlo, nadie lo ve de forma nítida y todos se preguntan por qué está tan desenfocado.
Siempre come solo, toma café solo y, aunque fumaba, lo ha dejado hace un par de años. Inteligencia no le falta y, si tuviera algo más de sangre, podría llegar lejos. No podrá ser medianamente bueno en trabajos que requieran contacto con el cliente y él lo sabe. Si haces un intento de acercamiento, se deja, pero, por si mismo es incapaz de mantener una relación social en el trabajo. Así que se abandona en su soledad y en su mundo y se limita a trabajar con la intensidad que cada mometo requiera, siempre bien, siempre eficazmente… Siempre solo. Otro ejemplo de falta de organización, calidad interna, ausencia de procedimientos y departamentos aislados y sin interconexión, tan necesaria en los hoteles.

Así es Cosme Bocanegra. ¿Será porque su padre es dentista?.

Eso es todo, ni más ni menos.

Hasta la próxima.

Rafael.

Otros empleados de hotel:

(I) EL tóxico (por Juan Sobejano)
(II) El integrador
(III) El mendigo
(IV) El maniquí
(V) El ratón de armario
(VI) El mafioso (por Marcos Alonso)