Podemos encontrar una cantidad ingente de resultados en Google sobre cómo triunfar en redes Sociales que nos van a dar un sinfín de consejos impagables sobre lo que debemos y no debemos hacer. Pero la dificultad real está unos cuantos pasos más atrás. Todos los que hablamos de vez en cuando de lo que es o no es apropiado, lo hacemos desde un enfoque que requiere unos pasos previos para alcanzarlo. Es decir, nos saltanmos los pasos previos. 

Todos hablamos de qué es lo idóneo en redes Sociales suponiendo que el que lo lee ya está dentro. Ese es el paso que nos falta: ¿Cómo entramos y cómo echamos raíces?

En mi opinión hay tres vías de entrada posibles:

  1. Creamos un perfil corporativo y comenzamos un trabajo de hormiga con una labor de microcirugía marketiniana, sorteando, además, los obstáculos propios de una marca poco conocida ante la defensa numantina de los usuarios, los cuales con sólo vislumbrar el concepto «marca» se ponen de uñas (no todos, pero si un alto porcentaje). Reconozco que la situación no es muy motivante, pero con un poco de paciencia (2 ó 3 años, estimo) pueden conseguirse resultados sorprendentes.
  2. Designamos a una persona de la organización para que se empape de todo lo relacionado con este intrincado mundo y le dedique su tiempo en exclusiva, invirtiendo de 1 a 1,5 años para crearse una imagen personal en Redes Sociales. Una vez tenga creada y asentada esa imagen, comenzar a utilizarla para promocionar la marca. ¡Ojo!, esta opción tiene bastante riesgo, pues esa persona a la que tanto trabajo le ha costado crearse su imagen personal puede perder todo lo ganado si no es prudente en la difusión de la marca.
  3. Buscamos a alguien externo a la empresa y que ya tenga creada y asentada una imagen personal en Redes Sociales, y aplicamos todo lo dicho en el punto 2. Esta es sin duda la opción más rápida, pero también la más cara con mucha diferencia. La marca personal no debe ser barata.

Las dos primeras tendrán un coste decoroso, pero requieren de mucho tiempo. La tercera es rápida (de 6 a 9 meses, estimo), pero el coste es mucho más elevado.

Y, en mi opinión, no hay más. Tú eliges.