La pieza fundamental y piedra angular de todo el sistema es el personal, la plantilla, el staff. En este modelo de Empresa abierta – Hotel abierto debemos contar con empleados colaboradores que tengan unas características personales y profesionales bastante concretas, lo cual no quiere decir que sean complicadas. Además sería de mucha ayuda el decidir un puesto de trabajo central alrededor del cual gire toda la gestión. Y este puesto no tiene que ser el del Director y no tiene por qué ser el de un mando intermedio. Pero sin entrar en este debate, vamos a exponer las características que debemos buscar en los candidatos a cubrir el puesto de nuestro Hotel Abierto:

  • Nivel elevado de empatía.
  • Conocimientos de procesos hoteleros. No es imprescindible una experiencia dilatada. La experiencia no es el principal requisito.
  • Edad comprendida entre 20 y 45 años (nativos e inmigrantes digitales).
  • Capacidad absoluta de trabajo en equipo (Imprescindible).
  • Ganas de aprender en una empresa basada en un modelo abierto de gestión y enfocada a la interacción del personal con los clientes, con el máximo de calidad alcanzable.
  • Para desempeñar una serie de tareas, rotando regularmente por todos los departamentos del hotel.
  • Proactividad, pero en el sentido contrario a reactividad, es decir anticipación a las situaciones, y no intento de solución después de aparecer los problemas.
  • Capacidad de adaptación a cambios continuos.
  • Sin miedo al fracaso.


Estos son los requisitos que debería cumplir el personal de nuestro Hotel Abierto.
En cuanto a la empatía tendremos que estudiar al candidato, basándonos en unos parámetros:

  • Comprobar el punto anterior mediante la exposición de dicho mensaje por parte del candidato, de forma concreta y directa.
  • Evaluar si el candidato comprende el mensaje
  • Congruencia en las respuestas respecto a una serie de problemas planteados.
  • Valorar si el candidato aporta alguna experiencia personal que nos provoque la sensación de que sabe de qué estamos hablando.
  • Prestar atención a la comunicación no verbal para detectar posibles contradicciones.
    Sobre la experiencia, preferimos que sea corta, para no tener que pulir vicios y costumbres poco acordes con la idea de desarrollo del negocio.
    Necesitamos, sin descartar otras opciones, nativos digitales acostumbrados a la práctica de conversaciones en red y al uso práctico de la inteligencia colectiva. No obstante, esta característica es susceptible de ser enseñada, por lo que no debería ser imprescindible, aunque si deseable.
  • Será fundamental el compromiso firme de trabajo en equipo anteponiendo los intereses profesionales del conjunto sobre los personales, entendiendo como personales aquellos intereses profesionales que sólo afectan al individuo como parte autónoma de un todo.
    Máxima atención a la calidad, tanto interna como externa, comenzando por la propia imagen (limpieza, educación, vocabulario, y buenas maneras en general) y llegando al máximo esfuerzo por la profesionalidad en el servicio prestado.
    Para todo el personal se establecerá un plan de formación continua con remuneración económica desde el primer día y enfocado a la gestión horizontal de un modelo “Open Business”.